El pasado mes de octubre, al futbolista camerunés Rigobert Song, ex jugador, entre otros, de Liverpool, West Ham United o FC Köln, sufrió un derrame cerebral. Pudo salvar la vida porque su perro, al ver como el jugador estaba en una situación algo peligrosa, comenzó a ladrar y eso alertó a los vecinos, que llamaron a los servicios médicos, que pudieron atenderle a tiempo y, así, salvarle.
En una entrevista que el jugador dio al diario francés L´Equipe, comentó que, de no ser por los ladridos de su perro, nadie se hubiera enterado del derrame del jugador y, muy probablemente, hubiera pasado algo peor. Song siempre le estará agradecido a un miembro muy especial de su familia. El jugador, que se encontraba en Camerún cuando ocurrió todo, fue hospitalizado y estuvo varios días en coma, siendo trasladado a un hospital francés para recibir un mejor tratamiento. A día de hoy, ya está recuperado y ejerce como seleccionador del combinado camerunés formado completamente por jugadores de la liga local.